Subir el IVA a la sanidad y la educación sería un error que acarrearía incremento del gasto público, cierre de empresas y desempleo, advierte la CREEX

Subir el IVA a la sanidad y la educación sería un error que acarrearía incremento del gasto público, cierre de empresas y desempleo, advierte la CREEX

Gravar con un 21% de IVA la prestación de servicios privados de sanidad o educación, como ha planteado el Ministerio de Hacienda, no solo no reportaría beneficios a las arcas públicas, sino que supondría un mayor gasto público, el cierre de empresas y más paro.

Así lo ha señalado la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), añadiendo que además mermaría la libertad de elección de las familias con menos recursos.

Según ha afirmado Javier Peinado, Secretario General de la CREEX, “no estamos ahora ni para subidas de impuestos con criterios ideológicos sin fundamento económico alguno, ni para sobrecargar el sistema sanitario o el educativo”.

En su análisis, Peinado ha aludido al hecho de que implantar ahora el IVA en estos sectores no solo no incrementaría los recursos públicos, sino que tendría un efecto contrario: “no lo decimos solo nosotros, la propia Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) lo ha constatado: muchas personas que ahora recurren a la sanidad o la educación privadas, se verían forzadas a ir a la pública, y esto conlleva un incremento de personal y recursos públicos más elevado que la cantidad que se pueda recaudar por IVA”.

Según la AIReF, en el mejor de los casos el impacto de imponer el IVA en la sanidad supondría un incremento neto de 300 millones de euros en recursos públicos, y en el escenario menos favorable un coste adicional de 400 millones. Para la educación el panorama sería similar.

Sobrecarga para el sistema público

A ello habría que sumar, advierte el Secretario General de la CREEX, lo que se derive del cierre de empresas al caer la demanda con el consiguiente aumento del desempleo. “Estaríamos ante menor recaudación por otros conceptos fiscales al cesar las empresas su actividad, y también ante un mayor gasto en prestaciones al pasar los profesionales al paro”.

El dirigente de la organización más representativa del empresariado extremeño se ha preguntado si este es el momento adecuado para añadir presión al sistema sanitario público, incluso al educativo. “¿Es razonable que con la situación que vive la sanidad por la pandemia se pretenda sobrecargarla con más pacientes? ¿Cabe en la cabeza que con las medidas implantadas en los centros educativos alguien se plantee que el sistema público tiene que admitir de golpe a muchos más alumnos?”.

Además, ha indicado que ni el argumento ideológico se sostiene: “si elevamos el coste de acceso a estos servicios privados, ¿quién quedará excluido? Evidentemente, quien tenga menos recursos, a quien se privará de cualquier posibilidad de libre elección. Es una medida antisocial”.

Asimismo, ha comentado que esta iniciativa, o globo sonda, ya ha recibido el rechazo tanto de las organizaciones empresariales como de los sindicatos, y de la mencionada autoridad fiscal.

Print Friendly, PDF & Email