Los costes directos de construcción en edificación residencial, que comenzaron a moderar su ritmo de crecimiento en 2022, se estabilizan en el primer semestre de 2023 con una ligera subida del 2,8% interanual, según refleja el Índice de Costes Directos de Construcción que elabora ACR, que se situó en 172,04 puntos al cierre de junio, medio punto por encima del nivel alcanzado en el primer trimestre del año, cuando se situó en 171,45 puntos.
Los costes directos de construcción en edificación residencial, que comenzaron a moderar su ritmo de crecimiento en 2022, se estabilizan en el primer semestre de 2023 con una ligera subida del 2,8% interanual, según refleja el Índice de Costes Directos de Construcción que elabora ACR, que se situó en 172,04 puntos al cierre de junio, medio punto por encima del nivel alcanzado en el primer trimestre del año, cuando se situó en 171,45 puntos.
Se mantiene así la tendencia alcista iniciada en 2015, año desde el que se registra esta serie. Una línea de crecimiento que se puede apreciar, de manera generalizada, en todos los sectores y no solo en construcción, pero cuya subida comienza a perder intensidad, según publica El Confidencial.