La Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) ha advertido que dejar fuera al comercio y la hostelería de la prórroga de los ERTE supondría la caída de miles de pequeños negocios y mandar al desempleo a decenas de miles de personas.

Así lo ha asegurado el Secretario General de la CREEX, Javier Peinado, quien ha señalado que las intenciones del Gobierno de España de limitar la prórroga de ERTE a sectores como el turismo “sería un gravísimo error, de consecuencias catastróficas, puesto que estos ERTE están siendo un salvavidas, siquiera precario, para miles de pequeños negocios, que han estado meses sin ingresos y ahora tienen una actividad marcada por las restricciones y el descenso del consumo, que a duras penas llega al 50% de lo que sería normal”.

El Secretario General de la CREEX ha vuelto a abogar por que sean las empresas las que marquen cómo y cuándo se sale de los ERTE, de manera total o escalonada, y también que se dé la posibilidad de que una empresa que sale de ERTE pueda volver si las circunstancias obligan a ello. “Parece que se sigue sin entender que ningún empresario quiere estar en ERTE, que es una fórmula de emergencia para salvar el negocio, y que hay una casuística muy variada en cuanto a sectores, tamaño de empresas, tipo de actividad o ubicación”, ha explicado.

Ayudar y no hundir

Por ello, ha instado al Ejecutivo nacional a tomar medidas “que ayuden, no que terminen de hundir unas actividades ya muy tocadas por la crisis económica derivada de la pandemia”.

De este modo, el dirigente de la entidad más representativa del empresariado extremeño ha reclamado “acciones en positivo” que aporten oxígeno especialmente a microempresas y autónomos: “hablamos, por supuesto, de ERTE según la fórmula adoptada en mayo en cuanto a prestaciones para el trabajador y exoneración de cuotas para el empresario, pero también de exenciones fiscales, ayudas al alquiler, incentivación del consumo, bajada del recargo de equivalencia o líneas de liquidez reforzadas”.

De no actuarse en esta línea, ha reiterado, a la vuelta de pocos meses el panorama será desolador. “Vamos a ver cómo echan la persiana definitivamente muchos negocios, con las consecuencias inevitables de pérdida de oferta, incremento de los gastos por prestaciones de desempleo, impacto en la cadena de suministro de los proveedores, impagos…”, ha resumido.