CREEX ha celebrado su habitual Encuentro de Negocios de Extremadura (ENEX) en el que se ha debatido la actualidad empresarial y las perspectivas a corto y medio plazo.
En el ámbito nacional, se mira con cautela el crecimiento del PIB, soportado por las exportaciones, el turismo y el incremento del gasto público en forma de licitaciones a cuenta de los fondos de recuperación. La cautela viene dada porque esta estructura de crecimiento tiene un recorrido corto y, en el caso del gasto público, incrementa la deuda pública ya de por sí elevada.
En cuanto a las cifras macro, la inflación se cerrará de media anual en el 2,7%, noticia positiva por estar conteniéndose y porque la mayoría de convenios, según recomendación de CREEX, se referenciaron a subidas del 3% de la inflación para la revisión de salarios, lo que no incrementará previsiblemente los costes laborales ya inflados por el incremento de cuotas sociales.
Otro dato positivo es la bajada significativa del Euribor.
Por el lado negativo, el empleo crece pero se ralentiza. Preocupa también la falta de mano de obra y un absentismo laboral desbocado, así como el panorama de incertidumbre política.
Nuevas imposiciones
Con todo, lo que más preocupa son las nuevas imposiciones que plantea el Gobierno en materia laboral.
Por un lado, la reducción de jornada, donde la postura de CREEX es la misma que la de CEOE: no si no está vinculada a un incremento de la productividad. Como mal menor se está intentando que sea en cómputo anual, que permite más flexibilidad, ya que si se realiza en cómputo semanal causaría graves problemas a la micropyme y autónomos con trabajadores en aquellas actividades de atención al público, como restauración, comercio o servicios que han de mantenerse las 24 horas.
Por otro, el nuevo sistema de control horario, que obliga a inversiones en software e incrementa la carga burocrática, por lo que se está intentando que no se aplique a pymes con menos de diez trabajadores y autónomos con trabajadores.