Abandonar posturas demagógicas y simplistas, así como dejar las amenazas y la culpabilización de las empresas para emprender un diálogo en busca de soluciones es lo que la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) exige al Gobierno de España ante la continua escalada del precio de la electricidad.

“El Gobierno, hasta ahora, se ha refugiado en la demagogia y en echar las culpas a las empresas eléctricas, en vez de sentarse en una mesa con todas, las grandes y las pequeñas, y escuchar y proponer soluciones. Poner a la opinión pública en contra de las compañías no aporta nada ni nada arregla”, ha explicado el Secretario General de la CREEX, Javier Peinado.

Según su análisis, el alza continua de precios está golpeando sobre todo a la pequeña empresa, y particularmente a la dedicada al sector servicios (comercio u hostelería, por ejemplo) “que dependen mucho de este coste, y donde se está generando gran ansiedad e incertidumbre, puesto que el problema no es solo lo que ha subido ya, sino que no se sabe hasta dónde subirá”.

Peinado ha subrayado que este sobrecoste aún no se ha trasladado al mercado, porque lo están soportando los negocios a costa de su rentabilidad, pero esta situación no puede mantenerse por mucho tiempo.

“Me preocupan tres aspectos. El primero es que las familias están perdiendo poder adquisitivo, y esto va a tener incidencia directa en el consumo interno; el segundo es que las empresas, cuando ya no aguanten más y tengan que trasladar el coste al mercado, verán caer su competitividad, puesto que hay países fuera del entorno europeo que no están teniendo estas subidas de la electricidad, y el tercero es que en vez de buscar soluciones se ponga a la opinión pública contra las eléctricas, que son empresas, grandes y pequeñas”, ha señalado el Secretario General de la CREEX.

Por eso, ha insistido en que el Gobierno de España debe corregir el rumbo y convocar a todas las empresas del sector, grandes y pequeñas, escuchar cuáles son los problemas y cuáles las propuestas de solución, “que seguro que las hay”.

De hecho, ha recalcado, “en la CREEX ya nos hemos sentado con estas empresas, que nos han expuesto la situación y posibles soluciones, y eso es lo que más urge porque la actitud actual está perjudicando, como siempre a microempresas y autónomos, que es la mayoría del tejido productivo de Extremadura”, concluye.