CREEX estima que la economía tardará al menos dos años en recuperar el nivel precovid, aunque espera que se invierta la tendencia negativa en el tercer trimestre de 2021

CREEX estima que la economía tardará al menos dos años en recuperar el nivel precovid, aunque espera que se invierta la tendencia negativa en el tercer trimestre de 2021

El Secretario General de la CREEX, Javier Peinado, ha hecho balance de 2020 y esbozado expectativas para 2021, en lo que se refiere a la evolución de la actividad productiva en Extremadura.

Según ha señalado, la situación económica se ha seguido deteriorando a lo largo de 2020, y no es previsible que a corto plazo cambie la tendencia, puesto que las nuevas limitaciones a la actividad y las prohibiciones van dañando al tejido productivo “en un momento en el que las empresas ya no tienen oxígeno para aguantar, han agotado sus recursos”.

Peinado ha explicado que en algunos sectores el cierre de 2020 ha evidenciado descensos de hasta el 80% de la cifra de negocio, dentro de una media de pérdida de ventas que puede situarse en el 50%.

“En Extremadura, sobre todo en la primera fase de la crisis sanitaria, el empleo aguantó algo mejor, tanto por la configuración de nuestra economía, con gran peso del sector primario y la Administración pública, como por las medidas que la Junta tomó en el seno del diálogo social, que paliaron en alguna medida los efectos”, ha indicado, para agregar: “sin embargo, estas medidas venían marcadas por las limitaciones financieras y competenciales de la Junta, y al alargarse la crisis frenan algo, pero ni impiden el deterioro. A esto se une que el Gobierno trazó medidas como los ERTE o los ICO que fiaban su efectividad a que el timming de la crisis fuera de tres o cuatro meses. Al alargarse no solo han perdido eficacia, sino que además el Gobierno ha marcado más impedimentos en lo que se refiere a los ERTE, y ya no bastan”.

Según ha explicado, sin medidas realmente eficaces por parte del Gobierno para soportar tantos meses, las empresas ya no pueden aguantar más “porque han seguido teniendo gastos fijos con cifras de ingresos muy bajas”, y muchas se verán abocadas al cierre.

“Muchas empresas ya renuncian a los  ERTE, y van a aplicar en cuanto les sea posible ERE o despidos. Han esperado hasta cerrar el año fiscal, y me temo que en este primer trimestre de 2021 veremos subir el desempleo”, ha manifestado el dirigente de la organización más representativa del empresariado extremeño, y ha añadido: “de hecho, ya se ha destruido el empleo que se creó en los últimos dos años”.

Recuperación

En cuanto al futuro, Peinado ha vaticinado que la vacuna irá poco a poco resolviendo la crisis sanitaria, no así la económica. “Espero que hacia el verano se detenga la caída económica y empecemos a recuperarnos, pero para volver a los índices de empleo, actividad y PIB precovid barajamos un plazo de no menos de dos años”.

Al hilo de esta recuperación, el Secretario General de la CREEX ha explicado que los fondos europeos de reconstrucción “pueden ser una palanca, un catalizador que acelere la recuperación, pero no la solución, la solución no pasa por las ayudas, sino por la dinamización económica. Además, pensemos en que cuando por fin se firmó el acuerdo de los fondos, allá por julio, se nos dijo que en marzo empezarían a aplicarse, y resulta que ahora nos dicen que, en el mejor de los casos, en marzo lo que estarán serán los reglamentos que marquen cómo se usan los fondos, así que es una nueva demora”.

Por ello, cree que el efecto de los fondos no empezará a notarse, como pronto, hasta el verano. El impacto que estos fondos tengan en la recuperación dependerá, ha asegurado, de cómo los gestionen el Gobierno y las distintas Administraciones, “por lo que demandamos eficacia y que los empresarios, que somos los que generamos empleo y actividad, tengamos voz en el cuándo, el qué y el para qué”.

A este respecto, ha comentado que hay esperanzas en cómo queden al final los presupuestos de Extremadura, “donde estamos en conversaciones con la Vicepresidenta Primera para solicitar alguna modificación, y que además vendrán muy marcados por cómo se distribuyan los fondos de la UE”, pero se desconfía de la actitud del Gobierno, “que ha aprobado unos presupuestos que no son los que necesita ni Extremadura ni España, donde toda la actuación en infraestructura se centra en el tren, sin atender otras inversiones adicionales también muy necesarias, de manera que nos encontramos, una vez más, con que el Gobierno de turno no es generoso con Extremadura, por decirlo de un modo suave”.

Finalmente, ha calificado como “un error absoluto” que paralelamente al presupuesto estatal se active una subida de la presión fiscal “que es la peor medida que puede tomarse en la situación actual”.