Javier Peinado, Secretario General de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX), en su análisis de las cifras de empleo conocidas hoy ha destacado, por encima de la subida del paro, la fuerte caída en la afiliación a la Seguridad Social.
“Enero nunca es buen mes para el empleo, y ahí se ve, donde claramente es el sector Servicios el que marca la pauta, aunque también hay que apuntar la notable bajada en cifra interanual”, ha comentado, para añadir: “lo que preocupa, y mucho, es la caída de la afiliación en 6.000 efectivos laborales, es decir, el doble de lo que ha subido el desempleo”.
Para el dirigente de la única organización que representa a todo el empresariado extremeño, el descenso en la afiliación va más allá de la situación estructural que padece Extremadura, y apunta al efecto de los cambios normativos como principal causa.
“Estamos recibiendo en CREEX miles de consultas respecto a las nuevas modalidades de contratación que se derivan de la reforma laboral, y aunque informamos de que existe un periodo transitorio, exigido por las organizaciones empresariales, hasta el 30 de marzo donde rigen las actuales normas, muchas empresas se están retrayendo en la contratación hasta ver cómo casan esas nuevas modalidades con lo que demanda su actividad productiva”, ha asegurado Peinado.
A eso se suma el incremento de costes, no solo por la inflación en cuanto a materias primas y energía, sino también por las subidas de sueldos, el fuerte incremento de cuotas de la Seguridad Social para las empresas y la subida de cuotas sociales para los autónomos: “en el corto plazo, el empresario tiene poco margen para ajustar costes, y los ajustes van por la vía de la contratación; ya advertimos durante la negociación de la reforma que las limitaciones a la contratación sumadas al incremento de costes iban pasar factura, y así ha sido”.
En todo caso, el Secretario General de la CREEX sí ha advertido de que las organizaciones empresariales se desvincularían del acuerdo de reforma laboral si en el Congreso se introduce alguna variación sobre lo acordado en el diálogo social: “el Congreso está legitimado para cambiar lo que quiera, pero nosotros firmamos un contrato a tres bandas, un pacto que no nos gustaba, que costó mucho negociar y que asumimos como mal menor. Si se cambia ese contrato inmediatamente para nosotros ya no tiene validez. Espero que eso no ocurra porque dañaría nuestra imagen como país y especialmente de cara a los inversores”.
Realidad del mercado laboral
Finalmente, en cuanto a lo afirmado ayer por el Presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, sobre la generación de 20.000 empleos en los próximos dos años, para cuya cobertura habría que recurrir a la inmigración, Javier Peinado ha explicado que las palabras del Presidente le merecen a la CREEX “aplauso y crítica”.
“Cuando hablo de aplauso es porque, por fin se reconozca, y además desde la posición del máximo dirigente de nuestra Comunidad Autónoma, una realidad que venimos denunciando desde hace años, y es que, pese a la cifra de desempleo, hay muchas empresas que no son capaces de cubrir los puestos que necesitan, y eso es algo que parecía que no se quería ver”, ha manifestado.
En cuanto a la parte de crítica, Peinado apunta a algo que ya trasladó a Fernández Vara nada más concluir su intervención de anoche en el Foro Santander: “le planteé qué vamos a hacer con las 95.000 personas que hay ahora mismo inscritas en el desempleo. Me parece estupendo que se traigan 10.000 personas de fuera, pero ¿qué hacemos con los parados que tenemos aquí, cómo logramos que accedan al empleo que demandan? No voy a demonizar a esas personas ni decir que son unos vagos, ese no es el discurso de CREEX, pero sí es cierto que en muchos casos falta empleabilidad y actitud, y en eso hay que ayudar y trabajar, con la recualificación como gran reto”.
Otra cuestión, ha agregado, es que un nutrido grupo de personas que están en las listas de paro registrado no están realmente demandando empleo. “Eso es algo que nunca se ha querido ver, que se ha pasado de soslayo, pero es hora de coger el toro por los cuernos: hay personas que se apuntan al paro pero no buscan trabajo, se apuntan por cuestiones que nada tienen que ver con eso, como por ejemplo, para ganar puntos en la escolarización de los hijos, o para acceder a una vivienda, a una beca, a otro tipo de ayudas… Eso hay que analizarlo y depurar quiénes de verdad están inscritos porque quieren un empleo y quiénes se inscriben por otras razones, y no deberían figurar como demandantes de empleo”.